LAS ANEMIAS

Anemias significa deficiencia de hemoglobina en la sangre, lo que puede deberse a que hay muy pocos eritrocitos o muy poca hemoglobina en ellos.

Las anemias, según la concentración de hemoglobina pueden ser:

• Normocrómicas: déficit del número de hematíes pero una concentración normal de hemoglobina en ello, por lo que si hay menos hematíes, habrá menos hemoglobina en sangre.
• Hipocrómicas: existe una baja concentración de hemoglobina.
• Hipercrómicas: alta concentración  de hemoglobina.

Las anemias, según el tamaño del hematíe pueden ser:

• Normocíticas: tamaño normal del hematíe, pero puede que se produzca alguna anomalía en la concentración de hemoglobina en su interior.
• Microcíticas: el hematíe es más pequeño de lo normal.
• Macrocíticas: el hematíe es muy grande.

Las causas que provocan anemia pueden ser muchísimas.

Por pérdida de hematíes: si existe una pérdida de sangre se produce una pérdida de hematíes importante. Al existir esta insuficiencia de hematíes en sangre el organismo no es capaz de generar tan rápidamente una cantidad de hematíes superior a la que ya se ha perdido y por tanto, existe una insuficiencia de hemoglobina. En otros casos, también puede deberse a una lesión en la médula ósea parcial o total, lo que genera una disminución de la producción de hematíes y por tanto, una disminución de la concentración de la hemoglobina en sangre dando lugar a anemias aplásicas. Además, puede darse la situación de que por alguna anomalía (hemoglobina anómala, enzimas presentes en el hematíe, parásitos, bacterias, grandes radiaciones…)  se proceda a la destrucción de los hematíes (hemólisis).

Se puede provocar una anemia también por una falta de maduración de los hematíes. Por ejemplo, la ausencia de  vitamina B₁₂, ácido fólico y el factor intrínseco de la mucosa gástrica puede reducir la reproducción de los eritroblastos en la médula ósea y puede dar lugar a una mala formación del eritrocito dando lugar a anemias perniciosas y megaloblásticas ó ferropénicas.